Aprovecho la ocasión para platicarles sobre una de mis series de anime favoritas de la temporada de otoño de 2022. Se trata de Uchi no Shishō wa Shippo ga Nai; también conocida por su título internacional My Master Has No Tail.
My Master Has no Tail sigue a Mameda, una pequeña Tanuki que inspirada por los relatos de su padre, ansía salir de la isla donde vive (y se refugia) junto con los demás Tanukis con el fin de poder “engañar” a los humanos tal y como lo hacía su padre. Sin embargo se encuentra con un Japón diferente a lo que suponía. En medio del caos que provoca una de sus fallidas bromas, conoce a Bunko, una maestra en el arte del Rakugo, de quien Mameda queda impactada. Unilateralmente Mameda decide convertirse en la aprendiz de Bunko.
Esta historia destaca desde varios ángulos, pero quisiera detenerme a platicar de tres de ellos: el ángulo contextual, el ángulo narrativo y finalmente el ángulo cultural.
Lo moderno y lo tradicional en conflicto
A diferencia de muchas otras, esta serie pide al espectador que cuente con cierto conocimiento sobre historia y folclor japonés o mínimo alguna disposición para investigar por su cuenta. La historia transcurre en algún punto entre los años 1912 a 1926 y es una clara alegoría a la confrontación entre lo nuevo (la modernización de Japón) y lo tradicional.
Durante la historia se ve abiertamente dicha confrontación, sobre todo desde la frustración inicial de Mameda, pero se observa también que varios personajes ven en riesgo su porvenir en aras de la modernización. Sin embargo, en lugar de adoptar un papel de víctima, tratan en medida de lo posible mantener a flote un arte que se basa principalmente en relatos provenientes del periodo Edo, es decir entre los años 1603 y 1867. Esto lleva al espectador a un auténtico viaje al pasado no solo por la ambientación de la obra, sino también por la antigüedad de los relatos que se transmiten en ella.
Mameda: un personaje con excelente desarrollo
En cuanto al ángulo narrativo me voy a centrar en el personaje de Mameda, quien tiene una personalidad ambiciosa y en ocasiones tiende a tenerse demasiada confianza. Desde el inicio busca entrar al mundo del Rakugo por medio de su maestra, pero claramente desconoce el arte así como la idiosincrasia de la comunidad de Rakugokas. Comete muchos errores tanto como aprendiz dentro de la residencia de su maestra, como en el teatro donde se presenta y donde tiene que ayudar con tareas de limpieza y mantenimiento.
Pese a esto ella no se rinde y trata de corregirse, aunque sigue siendo carente de habilidad. Sin embargo, tanto su maestra como sus compañeros en el teatro la aceptan tal y como es y le ayudan a superarse a sí misma. Esto al grado de llegar a dar una presentación como telonera en un importante Matsuri de Osaka. Como tal Mameda no sólo evoluciona a un nivel personal, sino que también se sobrepone al aislamiento y aprende a vivir como una persona más y a sentirse cómoda dentro de la sociedad humana. Podemos hablar de un desarrollo de personaje que muy difícilmente se ve en el anime moderno, incluso sin perder su personalidad que podría describirse como torpe, pero adorable.
El arte del rakugo: sobreviviendo a la modernidad
Por último, en el aspecto cultural, My Master Has no Tail es impactante para el ojo occidental ya que el arte más cercano al Rakugo con el que hemos entrado en contacto es con los cuenta cuentos. Sin embargo, no se asemejan más que en el hecho de que se transmite una historia, ya que el Rakugo cuenta también con instrumentos de apoyo para el narrador, así como de acompañamiento musical que ayuda a ambientar la obra.
Quiero rescatar que el Rakugo pese a contar con varios factores que amenazan al día de hoy con su existencia, sigue siendo un medio de entretenimiento que no sólo sobrevive, sino que convive y compite con otros medios de entretenimiento cómico como son los Manzai y los comediantes de corte occidental. Vale la pena destacarlo, ya que a diferencia de occidente donde los autoproclamados comediantes denuncian una supuesta campaña de “cancelación”, las formas de comedias tradicionales japoneses sobreviven y se adaptan (mas no se convierten) a su realidad.
My Master Has No Tail se encuentra disponible mediante el servicio de HIDIVE y formó parte de la temporada de otoño de 2022. M.A.O dio voz al personaje de Mameda y Hibiku Yamamura actuó como el personaje de Bunko. Hideyo Yamamoto (Strike the Blood, Cells at Work! Code Black) dirigió la serie con el estudio LIDEN FILMS (Tokyo Revengers). Touko Machida (Lucky Star) supervisó los guiones y Ryo Yamauchi (Kabaneri of the Iron Fortress) diseñó a los personajes además de dirigir la animación.
Colaboración especial de Alfy MR.